Phuket Town - Sirinat National Park (al norte de Phuket)

Después de desayunar y darnos un pequeño paseo nos despedimos de la simpática Giorgi, la dueña del hotel donde tanto ella como el personal hacen que tu estancia sea un placer.

Thaland Road - Phuket Town

Interior del Hotel Casa Blanca

Hotel Casa Blanca

Salimos disparados del hotel a la estación de autobuses porque se nos ha ido el tiempo hablando con Giorgi. Son las onde y veinte y el autobús sale a las once y media. Llegamos justos, subimos y en el interior nos cobran los 100 bh por persona. El autobús tarda una hora y veinte minutos en llegar al aeropuerto internacional de Phuket que está al lado de Sirinat National Park y de nuestro hotel, donde nos dirigimos este último día en la isla.

De camino no deja de sorprenderte lo que ves, motos con tres personas, escaleras de bambú, los minibuses, sus casas humildes pegadas a la carretera y según te acercas al norte, las inmensas plantaciones de árboles (Heveas) para la extracción de látex.

Bus al Aeropuerto Internacional de Phuket

Minibuses Phuket

Conos de red para evitar la subida de roedores a los postes

Escalera de bambú - Phuket

Plantación de hevea -Phuket

Casas con su tienda adosada - Phuket

Al llegar al aeropuerto nos recoge personal del Hotel Perennial. Es de agradecer porque en ese momento tenemos un sol de justicia.

Hotel Perennial

El hotel fue una sorpresa. Solo un tres estrellas pero con unas instalaciones que podría perfectamente tener una categoría superior.

Aprovechamos y nos vamos a dar un baño a la playa del Parque Nacional, pero para entrar hay que soltar 200 bh por persona, así que no nos queda otra. El paisaje es increíble y cuando ya llegamos a la playa para prepararnos para darnos un baño, el paisaje es más increíble aún, basura para aburrir. ¡Cómo pueden tener las playas de un parque nacional con tanta porquería! En resumidas cuentas, nos fastidiaron el baño. Realmente nos lo fastidiamos nosotros mismos por incivilizados. Por favor, no tiréis nada a ríos y mares que al final nos lo devuelven. De todas maneras, aunque la culpa sea del que tira la porquería, es de locos que la zona que te indican para bañarte, delimitada por unas banderolas amarillas y rojas, que es la zona controlada por el vigilante de la playa (20 m tan solo), también esté llena de basura. Hay de todo: cargadores de móvil, bañadores, cepillos de dientes, chancletas, miles de botellas.... ¡mierda del color que pidas! A ver si se invierte parte de lo redaudado con la entrada al parque en limpiar las playas.

Parque Nacional Sirinat

Basura en el Parque Nacional Sirinat

Sistema de banderas para el baño

Zona de baño delimitada, ¡Swim here!... ¡en fin!

No hay baño, hay paseo. Y paseando paseando nos pasó un avión por encima despegando del aeropuerto y cruzando la playa hacia el mar. Así que esa fue la diversión antes de ir a tomar algo en un chiringuito que llevaban un par de chavales.

Aeropuerto Internacional de Phuket

Chiringuito del Parque Nacional Sirinat

De vuelta al hotel nos damos un buen baño en la piscina, ya que no hay mar... Descansamos un rato y nos damos una vuelta por el pueblo pegado al aeropuerto. Aquí ya es esencia pura y participas al cien por cien de lagente y sus costumbres, tan solo nos hemos cruzado con cinco turistas contados.